forja, un partido de valores

Habitualmente se discute entre conformar un Partido político de masas o un Partido de cuadros, Forja es un Partido de valores.

Cuando constituimos el Partido de la Concertación Forja, lo hicimos dejando atrás viejas estructuras políticas que no nos representaban cabalmente, pero rescatando los mejores principios del radicalismo, del peronismo, de la izquierda democrática y de otras expresiones del campo nacional y popular.

La política es la herramienta de transformación de las sociedades en democracia. Si los partidos políticos o las organizaciones de la sociedad civil no se apropian de la política para producir los cambios, gobiernan los intereses económicos, gobiernan los poderes fácticos. Durante décadas se expresaron a través de las fuerzas armadas y los golpes de Estado, en algún momento produjeron golpes de mercado y cooptaron a los partidos populares, hoy lo hacen a través de sus dispositivos políticos, económicos, mediáticos y judiciales. Por eso reivindicamos a la política y los partidos políticos como vehículos para transitar la democracia.

Forman parte de nuestra doctrina la intransigencia de Alem frente a la corrupción de las oligarquías y que nuestra causa es la causa de los desposeídos. Creemos, como Yrigoyen, en la no intervención en los asuntos internos de otros Estados soberanos, en que los Pueblos son sagrados para los Pueblos y que el Estado tiene que cumplir un rol reparador frente a las injusticias de las fuerzas del mercado, teniendo bajo su mando herramientas de soberanía como YPF.

Queremos una Argentina justa, libre y soberana, como lo proclamó Perón y creemos que detrás de cada necesidad hay un derecho.

Sostenemos a la Democracia como valor supremo de convivencia pacífica, sostenida por la libertad y la equidad. Sin libertad con justicia social no hay democracia. Una y otra son imprescindibles y complementarias en una democracia social.

Basamos nuestra doctrina democrática en el Nunca Más. Nunca más un golpe de Estado en la Argentina, nunca más una dictadura, un torturado, un preso político o un acto de censura. Luchamos por el cumplimiento irrestricto de los Derechos Humanos y estamos convencidos que el juicio a las juntas militares marcó un punto de inflexión en la política argentina, terminando con 50 años de golpes y refundando la democracia para todos los tiempos.

Decía el alegato final en el juicio: “Los argentinos hemos tratado de obtener la paz, fundándola en el olvido y fracasamos; hemos tratado de buscar la paz por vía de la violencia y el exterminio del adversario y fracasamos. A partir de este juicio…nos cabe la responsabilidad de fundar una paz no basada en el olvido, sino en la memoria, no en la violencia, sino en la justicia”

Somos herederos del juicio a las Juntas de Alfonsín y nos sentimos parte de la política de memoria, verdad y justicia sentada por el Kirchnerismo.

SOMOS FORJA

Hoy estamos transitando momentos de retroceso inadmisibles en el conjunto de valores que se intenta imponer en nuestro sistema político.

Forja forma parte del Frente de Todos, porque estamos convencidos de la unidad del campo popular para enfrentar a la derecha salvaje. Es una unidad de acción, pero fundamentalmente es una unidad conceptual para construir un país más justo, equitativo y solidario en el que el trabajo registrado sea la columna que vertebre la vida de la sociedad. En el que las necesidades sean satisfechas, empezando por los que menos tienen, porque esas necesidades son consideradas derechos humanos básicos. Apostamos a un país en el que la educación, la ciencia, la cultura y la tecnología sean las fuentes que igualen las oportunidades para cada uno de nuestros ciudadanos y ciudadanas y sean el motor del desarrollo con valor agregado. Soñamos y luchamos por un país en el que las niñas y los niños crezcan sanos, alimentados y llenos de esperanza.

Para ellos estamos gobernando y sabemos que, si vuelve nuevamente la derecha al gobierno, todos estos sueños se convertirán en pesadillas. Por eso debemos ejercer el gobierno con valores inquebrantables, convicción, coraje y la ética de la responsabilidad.

Entendemos nuestro rol en la acción política desde el ejecutivo y la representación legislativa local, provincial y nacional con la lectura permanente y cercana de la realidad cotidiana de la gente, los proyectos que trasciendan las coyunturas de la gestión y promuevan trasformaciones profundas para los desafíos que vienen postergándose desde hace tanto tiempo.

Vamos a seguir trabajando POR UNA Argentina definitivamente de pie. Lo hacemos desde la ética, desde valores, por una democracia para siempre y una patria para todos.